Desde el momento en que aparecen los primeros dientes, es fundamental establecer una rutina de higiene dental adecuada.
La caries dental es una de las enfermedades crónicas más comunes en la infancia, pero puede prevenirse con buenos hábitos.
La salud bucal no solo afecta la sonrisa de un niño, sino que también influye en su salud general y desarrollo.
¿Cuándo comenzar a cepillar los dientes?
Desde la erupción del primer diente, se debe usar un cepillo suave y pasta dental con flúor, adecuada para la edad.
Para los niños menores de tres años, se recomienda usar una cantidad del tamaño de un grano de arroz. A medida que crecen, se puede aumentar a una cantidad del tamaño de un guisante.
Es importante supervisar el cepillado hasta que el niño tenga la habilidad suficiente para hacerlo solo, generalmente alrededor de los 7 años.
¿Cuál es la frecuencia de cepillado recomendada?
Se recomienda cepillar los dientes al menos dos veces al día: por la mañana después del desayuno y antes de acostarse.
Además, usar hilo dental una vez que haya dos dientes que se toquen es esencial para eliminar la placa entre los dientes, donde el cepillo no puede llegar.
También es recomendable que los niños enjuaguen su boca con agua después de consumir alimentos azucarados o ácidos para ayudar a neutralizar los ácidos.
Visitas al dentista: ¿cuándo es aconsejable ir?
La primera visita al dentista debe hacerse antes del primer cumpleaños o cuando aparezca el primer diente.
Durante esta visita inicial, el dentista evaluará la salud dental del niño y proporcionará recomendaciones sobre el cuidado dental en casa.
Las revisiones regulares cada seis meses ayudarán a identificar problemas antes de que se agraven y permitirán al dentista realizar limpiezas profesionales y tratamientos preventivos.
Consejos para hacer del cepillado una actividad divertida
Hacer del cepillado una actividad divertida puede motivar a los niños a mantener buenos hábitos. Algunas ideas incluyen:
- Juegos: Crear un juego donde cada vez que el niño se cepille, pueda ganar puntos hacia una recompensa.
- Canciones: Usar canciones o temporizadores para hacer que cepillarse sea divertido; hay aplicaciones que ofrecen música específica para el tiempo recomendado de cepillado (dos minutos).
- Personajes favoritos: Incorporar personajes o juguetes favoritos durante el cepillado puede hacer que sea más emocionante.
- Recompensas: Establecer un sistema de recompensas por mantener una buena rutina durante un mes puede incentivar a los niños a cuidar sus dientes.
La importancia del ejemplo
Los niños aprenden observando a sus padres y cuidadores; por lo tanto, es muy beneficioso que los adultos practiquen buenos hábitos de higiene dental.
Cepillarse juntos como familia puede ser una forma efectiva de fomentar esta práctica.
Higiene dental en niños
La higiene dental en niños es crucial no solo para prevenir caries, sino también para establecer hábitos saludables que perduren toda la vida.
Al involucrar a los niños en su propio cuidado dental y hacer del cepillado una parte divertida y rutinaria de su día, estamos sentando las bases para una sonrisa saludable en el futuro.
